
Nada más salir del máster en finanzas empecé a trabajar en uno de esos sitios en los que tienes el camino marcado para ser el chico modelo. Después de unos años como junior daría el salto a senior y, con el paso del tiempo, culminaría como socio. El sueño de todo joven recién graduado, ¿no?
En cambio, yo venía acumulando varias experiencias que me iban diciendo que aquello no era lo mío. Había visto cómo se tomaban decisiones de inversión en función de quién te pagaba más comisiones, en lugar de pensar en el cliente; había participado en la elaboración de informes súper largos pero que no decían absolutamente nada; había trabajado en proyectos de las administraciones públicas que no había por dónde cogerlos. Un día me cansé de aquel circo, me aparté y ya no volví jamás.
Decidí dejarlo todo y aprender sobre el tema que más me gustaba: la bolsa y los mercados. Por muy triste que suene, después de 5 años estudiando economía y empresa no sabía hacer ni la O con un canuto en el ámbito bursátil. Decidí recluirme, no quería saber nada de lo que ocurría a mi alrededor.
Me tiré como loco a ver vídeos de Youtube, a buscar información en foros y a leer libros clásicos. Por mis manos pasaron el mítico «Análisis Técnico de los mercados financieros» de Murphy, «Vivir del Trading» del psiquiatra Alexander Elder o «Padre rico, padre pobre», de Robert Kiyosaki. De cada uno sacaba un par de ideas y las iba hilando, era como coger las piezas de un puzzle por separado e ir construyendo la imagen que piden en la caja.
Así fue como conocí las primeras estrategias de trading. Si en un libro me decían que tenía que comprar cuando el RSI marcara 23, allí que me metía a comprar lo primero que tuviera delante de la pantalla si veía un RSI en 23. Si en un vídeo hablaban de precio y volumen, no lo dudaba dos veces y entraba con la ansiedad del principiante, buscando resultados rápido.
Iba con toda la ilusión del mundo pensando que me ganaría la vida poniendo en práctica material encontrado en libritos de 15 euros o en vídeos de Internet por los que no había pagado ni un duro…
La realidad iba a ser muy diferente a la fantasía que tenía metida en la cabeza
Algunos consejos servían y ganaba dinero por un tiempo, pero luego el mercado me arrebataba en un abrir y cerrar de ojos el trabajo de varios días, era súper frustrante. No entendía por qué algunas herramientas funcionaban una temporada y después hacían aguas.
Tampoco conocía a nadie que estuviesen en mi situación hasta que un día tuve una charla con Ernesto, el amigo que conocí aquella vez que trabajé vendiendo para un bróker de CFDs. Le empecé a contar mis penas y le expliqué que no me funcionaba nada de lo que había probado.
Ernesto siempre me ha enseñado grandes lecciones, pero aquel día se me quedó grabado lo que me dijo en una cafetería del centro de Madrid:
«Kike, por los 15€ que te vale un libro no pretendas convertirte en el Rey Midas.
Ganar con el trading te va a llevar mucho más trabajo»
En bolsa la fórmula mágica no existe
Ernesto tenía toda la razón del mundo, el santo grial no se vende por lo que cuestan un par de cubatas. Fue cuando me di cuenta que la mayoría de libros de trading cuentan medias verdades:
- Te hablan de un patrón que funciona en tendencia pero en rango lateral falla más que una escopeta de feria,
- O de un indicador que bate al mercado en alta volatilidad pero cuando llegan los periodos de calma no acierta una,
- O de cómo aprovechar oportunidades históricas que ya no se van a volver a dar porque el mercado ha cambiado.
En este artículo te voy a contar las conclusiones que saqué de una de esas estrategias que estuve probando durante varios meses después de leerla en un libro.
El autor solía aparecer en la televisión hablando de bolsa, parecía conocer el terreno que estaba pisando. Se le ponía como modelo de trader, empresario y deportista exitoso. Era un ejemplo de éxito, un hombre hecho a sí mismo.
Te hablo de Josef Ajram, de quien ya di una opinión sobre su obra justo aquí:
La estrategia que contaba Ajram en su libro estaba relacionada con los GAPs. Así que para entenderla empezamos por el principio:
¿Qué es un GAP? Lo vemos con el ejemplo de la lonja
Un GAP es un salto en las cotizaciones debido a la falta de liquidez. La traducción al inglés literal sería «Brecha»
Dicho así en lenguaje técnico lo más probable es que no te hayas enterado de nada. Ni tú ni nadie, no es que seas tonto. Es que es imposible.
Así que mejor lo vemos con un caso real: la negociación diaria de precios en la lonja.
Después de pasar la noche faenando llegan los pescadores a primera hora. Nada más desembarcar clasifican el pescado que han atrapado. Después de una primera inspección lo ponen en una cinta mecánica para que desfile a la vista de todos.
Es como si fuera una pasarela de moda y los compradores, que están sentados en unas gradas alrededor de la cinta, lo ven de cerca y juzgan la calidad.
La subasta comienza desde un precio de partida alto y va cayendo hasta que un comprador interesado lo para y se lo lleva. Hace ya muchos años que se hace con un mando a distancia, pero de antes el precio lo paraban a voz en grito. Era parecido a las películas de Wall Street, sólo que con merluza y bonito.
Subasta en la lonja, con el precio en la pantalla, el producto en las cajas y los compradores en las gradas
Esto te lo cuento porque en la subasta de la lonja también hay GAPs. Si graficaras la evolución del precio como en la Metatrader verías que aparecen huecos en la cotización.
Lo vemos con una venta de 200 kilos de bonito, repartidos en lotes de 50 kilos. El precio arranca a 8 euros el kilo y baja de 50 en 50 céntimos:
- A 8€ y a 7,5 €/kg, los primeros precios, nadie quiere comprar,
- El primer comprador se lleva un lote de 100 kgs a 7€.
- Los dos últimos compradores se llevan 50 kgs cada uno a 6,0 y 5,5 €/kg
La subasta termina cuando se colocan los 200 kilos de bonito y los compradores que querían comprar por debajo, en torno a 5 euros, se han quedado sin nada. Vuelven a casa con las manos vacías por esperar demasiado una caída del precio.
Los GAPs aparecerían en los niveles no negociados: el primero entre los 8 y los 7€ y el segundo en los 6,5€.
Los GAPs en el trading y la importancia de la liquidez
Te he hablado de la lonja, pero imagínate que pones tu coche en venta a 20.000€. ¿Qué pasa si llevas 8 meses con el anuncio publicado y nadie te ha contactado? Pues que tendrás que bajarlo hasta que le interese a alguien.
Ya ves que este mercadeo es como el funcionamiento de la bolsa:
- Tienes un activo que cambia de manos con el precio moviéndose,
- Nadie está obligado ni a comprar ni a vender, lo hacen libremente, porque quieren.
- El precio fluctúa según la oferta y la demanda.
Pues con las acciones, los índices, las materias primas, las divisas… sucede exactamente lo mismo.
Si un activo está en tendencia bajista y en un precio no hay contrapartida, (no aparece comprador) el precio caerá al siguiente nivel. Y si ahí tampoco quiere comprar nadie, caerá más, hasta que alguien esté dispuesto a comprar.
Es como si te caes por una escalera. Irás bajando peldaño a peldaño hasta que alguien te pare, o llegues hasta el suelo. Lo vemos con un ejemplo real:
Fuerte GAP al no aparecer comprador en muchos precios
Aquí puedes ver el típico GAP de fin de semana. Después de cerrar el viernes habrá ocurrido un evento gordo que ha cambiado las expectativas de los inversores. Entonces, en la apertura del lunes te lo encuentras cotizando muy por debajo de la última referencia.
La mayoría de huecos suceden por la noche, aunque también aparecen intradía, sobre todo después de la publicación de los datos económicos más gordos, la tasa de desempleo o la decisión de tipos de interés en América.
Los productos que cotizan 24 horas, como el futuro del Petróleo, apenas presentan GAPs. En el otro extremo tenemos activos como el Ibex35, que cierra a las 17:30 hora española y hasta las 09:00 del día siguiente no abre. Este largo parón provoca muchos GAPs, ya que cuando el índice ibérico «duerme» el resto de bolsas siguen moviéndose.
La relación inversa entre la liquidez y los GAPs
Vale, todo esto sobre los GAPs está muy bien, pero… ¿por qué suceden? Aquí entra en juego uno de los conceptos más desconocidos, la liquidez. El resumen viene a ser este:
- A mayor liquidez menos GAPS.
- Cuanto menos liquidez, más GAPs encontrarás.
Uno de los activos con más liquidez del mundo es el futuro del Euro-Dólar. Con miles de traders intercambiando contratos cada segundo es prácticamente imposible ver saltos en la cotización.
En cambio, si te vas a un vencimiento alejado del futuro sobre el zumo de naranja verás un GAP detrás de otro. Ni hay operadores ni se les espera.
Si quieres saber más sobre la liquidez y cómo afecta a tu trading (te sorprenderá saber cuántos disgustos te va a evitar dominarla), aquí tienes este artículo:
Si te pilla un GAP de por medio no esperes que respeten tu Stop
Cuando empecé con el trading no me entraba en la cabeza eso de que tu Stop podía ejecutarse a un precio diferente al que había puesto. Es que no lo entendía.
«Pero vamos a ver, si hay una herramienta que sirve para limitar las pérdidas y tengo puesto el Stop en el BBVA a 5 euros, ¿cómo va a saltar a 3€?»
Era la pregunta que me hacía y para la que no tenía respuesta, hasta que la encontré. Fue una de las primeras bofetadas de realidad que me dio el mercado: el Stop no vale de nada si aparece un GAP.
En los libros te cuentan la parte bonita, pero ninguno te dice que te pueden arrasar, sucediendo algo como esto:
Salto de Stop en precio diferente al colocado por culpa de un GAP bajista
Así es como se aprende en la vida: a base de leches. Este pantallazo que acabo de poner no es que me lo pasara un amigo, no. Lo viví en mis carnes.
Tenía prevista una pérdida de 200€ como máximo, pero por culpa del GAP se fueron a la basura 100€ más, ¡un 50% adicional! Miremos el lado positivo: hay lecciones que salen mucho más caras.
Así que mucho cuidado con llevar posiciones gordas abiertas el fin de semana, ya que no sabes lo que te espera el lunes. Y cuando más apretado vas es cuando la ley de Murphy suele surtir efecto. Lo peor que puede pasar, pasará.
La estrategia de cerrar el GAP y las tres mentiras que encierra: por qué no deberías hacerla
Después esta amplia introducción vamos con la estrategia que aprendí en el libro de Josef Ajram. Consistía en operar a la contra los GAPs buscando el cierre intradía.
Es decir, si el Banco Santander cerró ayer en 5,00€ y hoy abre en 4,50€, deberías comprar en la apertura yendo a por un Profit de 50 céntimos. El objetivo es ir a por el cierre del hueco.
Según algunos estudios más del 95% de los GAPs tarde o temprano vuelven a su punto de partida y más de la mitad lo hacen en el mismo día. Pero esta información tiene trampa. Con el mercado en rango lateral efectivamente tienden a cubrir el vacío en la cotización, como puedes ver en la siguiente imagen:
Un gráfico con 15 GAPs y todos terminan cerrándose porque el mercado está en lateral
Parece que el patrón funciona, ¿no? Hay 15 GAPS seguidos y todos están rellenados. Claro, a cualquiera le enseñan esto y te confías, das por válido lo que te han contado.
Descubrimos la primera mentira: ¿Es cierto que los GAPS se cierran intradía?
Evidentemente no.
Hay una cosa que no te he dicho sobre el gráfico de arriba: es Diario. Ningún GAP se cerró el mismo día, ninguno. Algunos tardaron semanas y otros meses.
Si te lo plantan diciendo que es un gráfico de 15 minutos piensas: ¡Qué maravilla, pero si los 15 GAPs se cerraron súper rápido! Y luego resulta que es un engaño de lo más cutre.
La segunda trampa tiene que ver con el tiempo que aguantarás vivo buscando el cierre
Imagínate que nos ponemos a cerrar GAPs sin ton ni son. GAP que vemos, GAP que le enchufamos. Como ya has visto en la imagen de arriba, la estrategia funcionaría porque la mayoría de huecos se rellenan.
Pero claro, el trading no consiste en poner el Take Profit, echarse a dormir y despertar en un par de semanas cruzando los dedos para ver qué ha ocurrido. Quien gana en este negocio es porque gestiona el riesgo.
¿De qué te sirve ir a por un cierre de GAP de 50 puntos si por el camino se te ha ido en contra y has estado perdiendo 3.500 puntos? Eso no es sostenible. No sirve de nada.
El último engaño tiene que ver con el porcentaje de acierto
Te dicen que cerca del 95% de GAPS se cierran y entras a ciegas. Si casi siempre funciona muy mal se tiene que dar para que te pillen en la que no es. Estás pensando en los euros que vas a ganar antes de tenerlos en el bolsillo.
Lo que casi nadie se pregunta es qué ocurre con el 5% restante de la estadística. Ese porcentaje del que nadie habla esconde una verdad incómoda:
Hay GAPS que nunca se cierran.
Como lo oyes. Fíjate en estos dos GAPs alcistas marcados en amarillo que se dieron en el DAX30, ¡en el año 2003!
Gaps en Abril y Junio de 2003 en el DAX que nunca se cerraron
Podrían ser dos huecos más como los que hemos visto antes, de esos que engordan las estadísticas, pero no. Estos dos saltos llevan 20 años abiertos y no parece que en los próximos meses esto vaya a cambiar, ya que la bolsa alemana tendría que caer un 85%.
Ambos están en torno a los 2.700 puntos y a día de hoy el DAX30 cotiza por encima de los 15.000 puntos. Ha subido más de 12.000 puntos, multiplicándose por 6, ¡y los GAPs no se han cerrado!
¿Cómo se ejecuta la estrategia de cierre del GAP en este caso? ¿Deberías mantener abierta tu posición bajista veinte años? No se, creo que es mejor poner el dinero en otros sitios. Ha llovido demasiado desde entonces, puedes verlo en el gráfico de largo plazo quitándole zoom.
Los GAPS de 2003 vistos en perspectiva
Los GAPs sí se pueden utilizar en un Sistema de Trading
Los saltos que el precio deja en las cotizaciones son un arma de doble filo. En rango lateral se les puede sacar bastante partido, pero en tendencia pueden ser tu perdición. Ir en contra de la mano fuerte sin Stop tiene consecuencias catastróficas.
¿Se puede ganar haciendo trading de GAPs? Claro que se puede. Por eso en el Curso de Trading encontrarás la manera de utilizar los GAPs para tener éxito. Aprenderás cómo detectar un punto de entrada, dónde colocar el Stop y cuántos lotes debes llevar para no dejarte todo en una mala jugada.
La diferencia es que los GAPs no son el centro del Sistema, son UNA PARTE más del sistema. Es la única manera de convertirlos en tu aliado en lugar de en tu enemigo. Si lo que quieres es empezar a trabajar como lo hacen los grandes por aquí:
6 meses de trading en directo siguiendo el Sistema de Reversión a la Media con tutorías individuales
Antes de terminar me gustaría que me dejaras tu opinión con un comentario:
¿Has hecho alguna vez la estrategia de cierre del GAP?
¿Crees que todos los GAPs se cierran?
¿Te la has pegado con algún sistema que viste en algún libro o en un canal de Youtube?
¡Un fuerte abrazo y buen trading de Gaps!
Enrique Mazón
