“¿Cuánto has ganado con la cobertura?”

Es la pregunta que tantas veces he escuchado cuando el jefe tocaba la puerta del despacho.

No me iba a hablar del tiempo, claro.

Sucede que está mal formulada. La función de la cobertura no es sumar más dinero. Es eliminar un riesgo financiero.

Te sorprenderías la cantidad de profesionales en el sector que confunden peras con manzanas. Sólo les interesa etiquetarte en uno de estos bandos: si ganas eres bueno y si pierdes eres malo.

Cuando empecé como Gestor de Riesgos sobre Gasoil en una compañía que descargaba barcos petroleros en el puerto de Bilbao mi función no era hacer más Profit, no.

Tenía que proteger a la empresa de las fluctuaciones del precio.

Conseguir que no afectaran las subidas o bajadas del Gasoil. Lo importante era preservar el margen de la intermediación.

Pero claro, eso arriba no lo veían claro. No entendían que yo moviese tanto dinero y que a veces las pérdidas en la cuenta de coberturas fueran escandalosas.

Me costó mucho introducir este concepto:

Una cobertura de riesgos puede ser perfecta y perder dinero

No tienen nada que ver las ganancias de la operación con la efectividad de la cobertura.

Como mejor lo entendieron fue al poner el símil del seguro de coche a todo riesgo: hay que pagarlo todos los años.

Si no tienes ningún accidente palmas dinero, claro. Pero el día que pegues el trompazo agradecerás estar asegurado.

Así fue como terminaron las discusiones.

Mucho antes de ir a Madrid me di cuenta de cómo se podían cubrir riesgos. Fue por casualidad, ayudando a mi padre

Y eso que siempre ha sido un autónomo que no tiene ninguna relación con las finanzas: se dedica al cronometraje en eventos deportivos.

Salieron unos nuevos equipos de cronometraje que fabricaban en Australia. El pago sólo se podía hacer en Dólares Australianos.

A ver, no era mucho dinero en juego. Cada equipo costaba unos 20.000 dólares.

Desde que cerraba el precio hasta que hacía la transferencia pasaba bastante tiempo. El material venía en barco, y 40.000kms no se hacen deprisa y corriendo, no.

Entre pitos y flautas 2 meses mínimo.

Se nos ocurrió juguetear con el tipo de cambio y asegurar el precio cuando había ido a nuestro favor.

Recuerdo que mirábamos el gráfico y cubríamos la compra con CFDs en una plataforma muy básica.

El resultado era lo de menos. Podían ser cien o doscientos euros arriba o abajo.

Lo importante fue que, sin siquiera saberlo en ese momento, era mi primera experiencia profesional trabajando con riesgos financieros.

No quiero seguir adelantando el contenido del post, así que voy a empezar con lo más básico: explicar desde cero qué es una cobertura.

Qué son las coberturas o Hedge-Trading

Es una operación cuyo objetivo es minimizar un riesgo financiero.

¿Y cuándo existen los riesgos financieros?

Cuando movimientos en el precio de un activo – sea el que sea – impactan en tu resultado.

Por ejemplo, una mina que extrae oro siempre va a estar expuesta al precio del metal. Siempre.

La cobertura se encargará de eliminar ese riesgo. Estará bien planteada si consigue que a la mina le da igual si el precio del oro suba o baje.

Parece que no es tan difícil, ¿no? Vamos con el siguiente paso.

Los dos tipos de riesgos financieros a los que se exponen las empresas

#1. El Riesgo Comprador

Lo asumen compañías que venden un producto antes de terminarlo.

Por ejemplo: un promotor inmobiliario que ha vendido las casas sin haber empezado la construcción.

Sabe cuánto va a ingresar. Pero todavía no sabe cuánto va a gastar porque el precio de los materiales puede subir.

Imagínate que han pasado 6 meses hasta que empieza la obra. Va a comprar la madera para los armarios de la cocina y se encuentra con que ha subido un 40%.

¿Va a llamar a los clientes para pedirles más dinero? Le van a mandar a paseo si lo hace. Incluso hasta le pueden denunciar.

No, asumirá recortes en su margen. Ganará menos con esa promoción.

Todo por no haber hecho una gestión de riesgos adecuada.

#2. El Riesgo de Venta

Se da cuando almacenan Stock y no lo sacan a mercado.

Sucede en las gasolineras.

Compran el Gasoil y lo guardan en el tanque pero no saben cuándo van a terminar de darle salida. Quizás pasa una semana hasta que lo vacían y reponen producto.

Les perjudica una caída del barril: su competidor, la gasolinera de enfrente, lo estará comprando más barato.

Y quieras que no, a todos nos gusta ahorrarnos unos centimillos a la hora de repostar.

 

Así puedes convertirte en el «salvador» dentro de una empresa

Esta idea me la dio uno de los mejores profesores que he tenido.

Nos animaba a charlar con los gestores y hacerles ver el peligro de mantener riesgos abiertos.

Lo vemos con la gasolinera: su negocio no consiste en tirar una moneda al aire y a ver qué pasa.

Es justo lo que sucede cuando no cubre el riesgo de bajada de Gasoil. Ha hecho una inversión brutal construyendo una red de proveedores, clientes y empleados, y un mal movimiento del precio lo puede tirar todo a la basura.

Si le haces ver que su futuro pende de un hilo y que tú puedes darle estabilidad no te va a dejar marchar jamás.

Ponte en la piel de un responsable financiero por un momento

Eres el jefazo de una importadora de azúcar.

Dices que las coberturas no valen para nada. Nunca ha habido problemas con unos precios que siempre se han mantenido estables.

«Toda la vida se ha hecho así y ha funcionado. No voy a cambiar nada.»

Por casualidad los precios van a tu favor y a final de año has sacado un pellizquito con el que nadie contaba.

Como no tienes cobertura de ningún tipo, perfecto, todos felices. Te ha venido bien el movimiento.

Todos te darán la palmadita en la espalda, serás el héroe de la oficina por unos días.

Pero.. ¿qué ocurre si el mercado va en contra?

Resulta que el precio del azúcar te ha hecho una jugarreta y a cierre de año toca presentar pérdidas. En empresas con los márgenes ajustados puede suceder a la perfección.

Da igual que el responsable ponga todas las excusas que se le ocurran: la calle estará esperando a la vuelta de la esquina con un hermoso cartel diciendo “Bienvenido a la cola del paro”.

Y no es tan fácil recolocarse cuando te han colgado ese San Benito en la espalda. Cuando eres el que hizo perder tanto dinero a la empresa X.

Todo por no cubrir unos riesgos cuando tenía que haberlo hecho.

Hablemos de cuándo abrir y cuándo cerrar una cobertura

Toda operación está basada en un plan. Sólo pondrás dinero en juego cuando suceda esto, esto y esto otro.

Es el a – b – c del trading. Ya he hablado largo y tendido sobre este aspecto, como en este post:

 

Aquí estamos hablando de cubrir amenazas, por lo tanto hay que identificar cuándo se genera el riesgo y cuándo termina.

La cobertura entra en juego en el mismo momento en que se genera el riesgo. Y termina cuando el peligro se ha esfumado.

No tiene sentido seguir cubriéndote si nada te puede hacer daño.

Los tres escenarios en los que ya no hay moros en la costa son los siguientes:

#1. Cuando vendes el Stock del almacén

La gasolinera de la que te hablaba antes ha dado salida al producto y se queda con el tanque vacío.

Ya no hay peligro de bajada de precios.

#2. Cuando compras el producto que  ya habías vendido.

En el caso del promotor inmobiliario, el riesgo se desvanece al adquirir los materiales y comenzar a construir.

Ya puede subir o bajar lo que quiera la madera, el hierro o el aluminio.

No le afecta.

#3. Cuando el evento importante ha pasado.

A veces interesa reducir el riesgo en eventos especiales, como el dato de empleo USA el primer viernes de mes a las 14:30.

Puede haber una explosión y es imposible predecir la dirección del precio, así que refuerzas tus defensas hasta que termine la tempestad y llegue la calma.

¿Por qué el Resultado consolidado de la cobertura debe ser CERO?

Volvemos al inicio del post. ¿Por qué te dije que una cobertura puede perder millones de euros y estar bien ejecutada?

Porque no hay que fijarse en cuánto ha ganado o ha perdido.

Hay que fijarse en cuánto riesgo ha eliminado.

El beneficio es secundario. Si ha ganado bien. Y si no, también.

Lo vemos con varios ejemplos en la siguiente tabla:

Una buena cobertura hace bien su trabajo siempre y cuando el neto se aproxime a cero.

Si la cobertura pierde 80, 100 o 500 mil euros pero por el físico estás ganando lo mismo habrá sido un éxito.

Fíjate en el primer caso, el de la gasolinera:

La Cobertura está evitando una pérdida de $160.000. De no haberla colocado el dueño de la estación de servicio se hubiera tirado de los pelos.

Pero las Coberturas que terminan en rojo también son exitosas.

Da igual perder 75.000€, como en el hedge planteado sobre el tipo de cambio. Está compensado la ganancia de los euros descubiertos.

Termino este apartado con una consideración.

En la tabla los números son demasiado «perfectos», con el neto global en cero.

La vida real no funciona así. No puedes hedgear al milímetro.

Los pedidos fallidos, devoluciones, comisiones del bróker.. provocarán pequeñas distorsiones.

 

Activos sobre los que hacer coberturas

¿Tienes riesgo? Entonces los límites los pones tú.

  • Una chatarrera que trae material desde China cubrirá el precio del acero y el tipo de cambio EUR-YUAN.
  • Un gestor de un fondo de inversión que va hasta arriba de empresas tecnológicas americanas cubrirá vendiendo futuros del NASDAQ.
  • Zumosol cubrirá el precio del Zumo de Naranja (sí, también cotiza).

Seguro que se te vienen muchos más ejemplos.

Da rienda suelta a tu imaginación.

Los tres productos financieros con los que se pueden hacer coberturas

Ya hemos identificado este amplio nicho en el que puedes meter la patita y convertirte en indispensable (sobre todo en el sector industrial, donde les suena a chino lo que les vas a contar). Sólo hay que llamar a las puertas adecuadas. Alguna se abrirá.

Ahora bien, si te ofreces como gestor de riesgos vas a ser vas a ser tú quien proponga cómo ejecutar la estrategia.

No esperes que nadie lo haga por ti ni que ningún responsable te vaya guiando. Es tu trabajo.

Te doy el abanico de opciones que tienes en tu mano y te digo cuál elegiría yo.

#1. Coberturas con CFD’s

Es lo más básico. Demasiado para un entorno corporativo.

Los CFD’s son el producto ideal para pequeños traders.

Replican precios prácticamente al tick. Además, permiten fraccionar los lotes hasta la mínima expresión.

Su flexibilidad les convierte en el producto estrella para cuentas de unos 10.000€.

Los activos más relevantes replican en CFD. El Euro-Dólar, el Petróleo, el DAX.. Lo que necesites, lo vas a encontrar.

El problema viene con la seguridad. Como tienen poca liquidez un deslizamiento te puede causar un agujero.

Que se puedan hacer coberturas con CFDs no significa que se debar. No te lo aconsejo en un ambiente profesional. Darás sensación de amateur.

Si cualquier cosa falla, ¿cómo se lo vas a justificar a la directiva si estabas trabajando con una plataforma de novatos?

Es mejor ir sobre seguro con el siguiente producto.

#2. Coberturas con Futuros

Te da lo que más necesitas: seguridad.

Con los futuros tienes las espaldas cubiertas:

  • Es una regulación estricta que no da lugar a dudas.
  • Hay liquidez de sobra para abrir y cerrar posiciones sin riesgo de deslizamientos.

Una cuenta de CFD se abre en unos minutos, pero para una de futuros a nombre de empresa puedes tirarte varias semanas hasta que reúnes todos los papeles y ellos lo aceptan.

He pasado varias veces por ello y a veces quería pegarme un tiro.

Ojo, y no son caras. Lo difícil es abrir cuenta, pero una vez la tienes todo son ventajas.

Por ejemplo, la de Interactive Brokers es gratuita y va como un tiro. Es la que utilizaba para hacer las coberturas del Gasoil y nunca he tenido ningún problema.

Lo bueno es que puedes complicarlo hasta donde quieras, no como en los CFDs que estás limitado por una plataforma muy básica.

En plataformas de futuros puedes juguetear lo que quieras y más:

¿Necesitas dejar órdenes condicionadas? Puedes programarlas.

¿Necesitas el AutoSpreder? Puedes tenerlo (pagando, claro)

¿Necesitas ver el volumen oculto? Puedes observarlo.

Si quieres ampliar más información te dejo este enlace donde hago un extenso repaso a los Programas de Trading.

El mapa de riesgos en las coberturas con futuros quedaría así:

Lo que vimos en la tabla anterior:

Si ganas con la posición descubierta, lo pierdes con la cobertura.

Cuando pierdes con la posición, lo ganas con la cobertura.

El objetivo es que el neto (línea naranja) se aproxime a cero.

#3. Coberturas con Opciones

Son una especie de seguro de riesgo.

Pagas una prima a fondo perdido – será tu máxima pérdida – y si el mercado va a favor la ganancia es ilimitada.

El Mapa de Riesgos de opciones con una prima de 2.000€ quedaría como te muestro:

El punto fuerte es la posibilidad de dejar correr las ganancias.

También es cierto que si la posición va en contra el Resultado no es cero: se pierde la prima.

Hasta ahora vamos empate a uno entre los futuros y las opciones. Tiene una cosa buena y otra mala. ¿Cómo deshacemos la igualdad?

Con este argumento: es una operativa mucho más compleja que la de los futuros.

Las plataformas de opciones son complicadas de entender. No vale con comprar o vender el primer activo que pase por delante, no.

Cada vencimiento tiene su miga. Hay que dominarlo de pe a pa.

Mira, éste es el panel operativo de OptionVue, un programa especializado en opciones.

Matriz de Precios en OptionVue

Tienes los distintos Strikes, vencimientos, Calls y Puts.. Una maraña de números y cifras difíciles de entender si no estás muy puesto en el tema.

Antes de tocar una tecla y liarla hace falta formación específica.

Equivocarte en un contrato supondrá varios miles de euros tirados a la basura.

¿Coberturas con futuros o coberturas con opciones?  Decide tú mismo

Hemos descartado los CFDs por su baja fiabilidad. Están muy bien para un trading de andar por casa, pero no son adecuados en un ambiente profesional.

Así que entre las dos alternativas restantes podríamos resumir las ventajas e inconvenientes con este cuadro-resumen:

 

En conclusión, las opciones son el recurso ideal para hacer una «cobertura especulativa». Cubres amenazas y dejas la puerta abierta a posibles beneficios. Pero son difíciles de manejar.

Si no quieres líos, sólo pretendes eliminar el riesgo y no complicarte la vida, los futuros es lo tuyo.

La provisión de fondos para las coberturas

Para cubrir 1 millón de euros de riesgo no hace falta depositar un millón en el bróker. Para eso son productos apalancados, para que no tengas que movilizar recursos extra a lo tonto.

El coste de oportunidad de asignar bien el capital es una gran ventaja competitiva.

Tampoco te digo que apures y vayas demasiado justo. Con 50.000€ no aspires a cubrir 2 millones de euros. Al mínimo movimiento a la contra saltará el Margin Call y el bróker cerrará la posición.

Hay que encontrar el equilibrio. Ni pasarte ni quedarte corto.

Mi regla de oro es tener en la cuenta un 30% de la cantidad a cubrir.

¿Quiero cubrir un millón? Entonces necesito 300.000€.

Con eso sé lo que puedo y no puedo hacer. Arranco las coberturas y voy ajustando:

  • Si la posición va en contra solicito a financiero más garantías para no incurrir en margin call.
  • Cuando va a favor retiro parte del beneficio o lo utilizo para provisionar futuras coberturas negativas.

Y así una y otra vez.

Mi Técnica haciendo Trading de Coberturas

Cuando me pasaba más de 10 horas al día enganchado a la pantalla buscando rascar 300 pavillos no concebía que pudiera haber otras maneras de trabajar. Creía que lo mío era lo mejor. Estaba cerrado a cualquier otro estilo.

Era un soberbio que escondía sus inseguridades mirando por encima del hombro a los demás. Uno de esos niñatos que no te gustaría encontrarte en la vida.

Luego me di cuenta de que el trading de coberturas es mucho más cómodo. No tienes la presión de hacer beneficio constantemente como en un Prop, donde una mala racha te puede mandar a la calle.

Tu función es eliminar riesgos y dar estabilidad a la compañía. Si no te complicas tienes un puesto asegurado para toda la vida.

Lo que pasa es que te reconozco que el riesgo cero tampoco me motiva.

Me gusta añadir una pizca de picante a la ecuación. No soy capaz de estarme quieto.

Entonces lo que siempre he hecho ha sido combinar las coberturas con un toque especulativo.

¿Y cómo me juego el dinero apostando por una dirección del mercado? ¿En qué fundamento esas decisiones?

Me guío por el sistema que tú también puedes aprender pinchando en el siguiente enlace:

 

La Estrategia de Reversión a la Media

 

Ahora me gustaría que me contaras tus experiencias en un comentario.

¿Alguna vez has hecho alguna cobertura, aunque sea una cuenta de ahorro en divisa extranjera (dólares o libra)?

¿Preferirías los futuros o las opciones para cubrir posiciones?

¿Te ves trabajando en un departamento de riesgos?

Un fuerte abrazo y muy buen trading de coberturas 😉

Enrique Mazón

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