
El 20 de febrero era jueves. Podía haber sido un día como otro cualquiera, pero para mí era diferente. Estaba preparando la maleta para uno de los viajes que más ilusión me hacen: ir a ver la Vuelta Ciclista Andalucía Ruta del Sol.
Tengo la fortuna de que mi padre les lleva haciendo el cronometraje electrónico – la parte más llamativa es la fotofinish – desde hace más de 20 años y aprovecho cada oportunidad que puedo parf vivir el evento en su más pura expresión.
El ambiente es inigualable. Ver a los ciclistas por la mañana prepararse para la competición, los coches de equipo con sus llamativos rótulos, subir en un coche de la organización para ver la carrera totalmente estresado porque parece que en cualquier instante todo va a saltar por los aires.. Aunque voy a currar para mí es una auténtica fiesta y no lo cambiaba por nada del mundo.
El caso es que aquel 20 de febrero de 2020 todas las bolsas americanas y alguna europea, como el índice alemán #DAX30, marcaban máximos históricos.
No era nada destacable la verdad. Los índices estadounidenses llevaban desde 2013 en subida libre, devorando nuevos máximos tras máximos sin ninguna resistencia de por medio.
Ya te digo, que hace sólo 3 semanas el Dow Jones estuviese a un paso de los 30.000 no era ninguna novedad.
Sin embargo, las tornas se han girado radicalmente en menos de un mes. La gran tendencia alcista que ha dominado el mercado desde 2009 ya es historia, y desde entonces las caídas se han sucedido en tiempo récord:
- La bolsa alemana ha llegado a perder un -40%
- El Ibex35 se deja un -41%
- El índice italiano pierde un -45%
- Los franceses un -41%
- Los principales índices americanos, Dow Jones y SP500 retroceden un -32%
- El tecnológico Nasdaq cede el -29%
Todos los activos en el mundo cotizados se han dejado, de media, un 30% desde aquel ya lejano 20 de febrero.
Una debacle en toda regla.
Conoces a la perfección la razón de este crash: la pandemia originada por el Coronavirus. Nadie podía esperar que un ser microscópico iba a ser capaz de tumbar a los gigantes del mercado en tiempo récord.
Habrá tiempo de analizar si lo que ha sucedido es lógico o no, si la epidemia sólo ha sido el desencadenante final para la explosión de la burbuja de deuda pública global o si se trata de una hiper reacción con pánico extremo y las aguas volverán a su cauce en cuanto se reanude la actividad económica.
Pero este post no va de hacer apuestas sobre el futuro. Sobre si la caída no ha hecho más que empezar, si habrá una recuperación en V o si necesita varios años de corrección antes de volver a arrancar motores. Olvidémonos de ese debate.
¿Qué hemos aprendido de la locura vivida en un abrir y cerrar de ojos?
Estábamos demasiado cómodos con la baja volatilidad. Llevábamos un tiempo en que los precios apenas se movían. Subidas de un 0,5%, caídas de un 1, una plácida tendencia alcista dominando de fondo..
Pero el contexto ha cambiado súbitamente y es momento de adaptarse. El «aburrimiento» ha llegado a su fin. La volatilidad está marcando un pico histórico, niveles nunca antes vistos.
No me importa tanto tu resultado de estas últimas semanas. Puedes haber ganado haciendo las cosas mal y haber perdido haciendo las cosas bien. Eso es lo de menos.
Lo crucial es entender que puede volver a suceder lo mismo. Aunque el siguiente rango lateral dure 10 años y sea tan insoportable que prefieras echar la persiana al trading sólo una chispa es necesaria para incendiar y destruir el bosque más hermoso. Y debes estar preparado
Jamás te diré lo que va a pasar la próxima semana. Si esperas mejor busca otro sitio web
Me hace mucha gracia cuando supuestos formadores o gurús de la bolsa se atreven a lanzar predicciones:
«El Ibex35 cerrará este mes en 9.500»
«El DAX30 visitará máximos históricos en junio»
«Hoy el DowJones bajará 100 puntos»
etc etc
Cuando leas algo así – lo encontrarás sin dedicarle mucho esfuerzo – lo primero que deberías hacer es preguntarte cómo un pobre desgraciado puede sacar esas conclusiones. ¿Acaso existe un túnel espacio-temporal por el que espía el futuro?
Evidentemente no. Si yo tuviera una máquina del tiempo y supiera con certeza que mañana el Dow Jones va a subir 200 puntos espera sentado si crees que voy a decírtelo. Pediría prestado el máximo posible y lo apalancaría comprando futuros, haciéndome rico en pocas horas.
Pero claro, la vida no funciona así.
Nadie, absolutamente NADIE tiene la capacidad de adivinar el futuro.
Entonces tú ahora me dirás: «es verdad, es imposible saber lo que va a pasar, pero hay crisis que se ven venir. Antes de la explosión de la burbuja subprime en 2008 varios economistas avisaban del excesivo riesgo bancario concentrado en las hipotecas basura, respaldadas por viviendas a precios desorbitados«
Y es verdad, no te lo niego. Algunas burbujas se ven venir desde Calatayud. Intuyes que la explosión está cerca y la posterior crisis será de agárrate.
La pregunta clave es: ¿se puede predecir cuándo va a explotar una burbuja?
La respuesta rotunda es NO. Es imposible pronosticar el timing exacto del final alcista.
Como mucho puedes intuirlo. Cuando detectas un activo burbujístico – un precio de mercado irracional respecto a su valor real – sabes que cuanto más suba más cerca estará de caer. Los excesos se pagan tarde o temprano.
La crisis del COVID ha abierto las puertas a un derrumbe del sistema económico mundial basado en la deuda «eterna». ¿Se avecina una cadena de impagos?
El shock sanitario y el miedo a la enfermedad han paralizado por completo la actividad económica. La gente se queda en casa, bien por voluntad propia o por prohibición, cerrando los negocios y cancelando eventos. El famoso #quédateencasa ya nadie se atreve a discutirlo.
Ahora bien.. ¿solamente un parón temporal de un par de meses ha provocado caídas del 40%? ¿O quizás hay algo más detrás?
La verdadera causa del desplome está en la excesiva deuda de TODOS los países desarrollados y el descomunal gasto público asumido año tras año. Una bola de nieve que no para de crecer.
Hay miedo, mucho miedo al final de la deuda infinita.
Si las empresas no facturan tampoco recaudan impuestos. Si el consumo se para no se recaudan impuestos. ¿Cómo van a seguir pagando los Estados los sueldos de trabajadores públicos y pensiones si su recaudación se hunde un 80%? Ese es el gran temor: el colapso del sistema de bienestar basado en gasto público.
Si en mi mano estuviera dirigir el Estado asumiría un gasto excepcional para proteger a la población con cargo a deuda 3-5 años. Lo acompañaría con reformas estructurales: bajada de impuestos, recorte de gasto público improductivo, eficiencia de una vez por todas del funcionariado español.. Saldríamos reforzados, tendríamos un balón de oxígeno ahora que vienen mal dadas y estaríamos sentando las bases de un futuro esperanzador.
Por desgracia no tengo la facultad para tomar esas decisiones. Esperemos que nuestros gobernantes tengan altura de miras y, por una vez, piensen en un modelo de convivencia sostenible en lugar de uno quebrado.
Lección 1: Una Crisis no avisa. Llega cuando menos te lo esperas. Los Stops son el único salvavidas
Hemos acostumbrado a la memoria a trabajar demasiado en el corto plazo. Nos creemos muchas veces el centro del mundo, sin estudiar el pasado para aprender de él y actuar correctamente en el presente. Como dirían los futboleros: «sólo vale el último resultado».
Lanzo una pregunta al aire: ¿Sabes si el COVID es la primera pandemia descontrolada que mata a miles de personas no prevenidas?
Lee con atención el bando municipal del gobernador de Burgos que publico a continuación. Año 1918.
Habla de una enfermedad de rápida transmisión, de cancelación de las fiestas patronales, de permanecer al aire libre o con las ventanas abiertas.. ¿Te suena de algo?
Efectivamente, hace ya más de 100 años la mal llamada «gripe española» asoló Europa, América y gran parte de Asia, causando más de 50 millones de fallecimientos en apenas un par de años.
No es la única pandemia registrada hasta nuestros días, ya que se cree que la Peste Negra «arrasó» con un tercio de la población europea y africana alrededor de 1.350.
Lo que te quiero transmitir es que la historia siempre se repite, más allá de si la crisis actual es financiera o sanitaria.
Lo verdaderamente importante es estar prevenido: en cualquier momento puede volver a suceder. Nadie sabe cuándo ni cómo, pero te garantizo que en el futuro llegarán nuevas crisis, si no es por una burbuja financiera, será una enfermedad infecciosa, un conflicto geopolítico repentino o por cualquier otro motivo que ahora mismo ni te imaginas.
Por eso es fundamental siempre tener Stops en todas las posiciones abiertas. Nunca des por hecho que el mercado no pueda desplomarse repentinamente. Lo ha hecho en el pasado, está sucediendo ahora y volverá a ocurrir en el futuro.
Lección 2: Minimiza el Riesgo Overnight y Over-Weekend: mantente a salvo de la psicosis.
Uno de los principios básicos de un Trader que quiera sobrevivir en el largo plazo es olvidarse de hacer el beneficio del año en un día. Si quieres seguir vivo en el juego de la bolsa más te vale ir sumando poco a poco.
Imagína que eres un cazador y vas al campo armado con tu escopeta para intentar atrapar algún ave. Sueltas unos trozos de pan como cebo.
A tu derecha aparecen unos gorriones pequeños, que cogen una migaja y salen volando enseguida hacia su refugio con su pequeño botín. Cuando se lo terminan vuelven tratando de permanecer en el suelo el menor tiempo posible. Cogen lo que les interesa y se van para minimizar el peligro.
A tu izquierda el campo se llena de palomas. Te das cuenta de que les interesa llevarse el trozo de pan más grande posible, y si pueden quedarse más tiempo porque no ven ninguna amenaza, campan a sus anchas para seguir comiendo.
Tú, que eres el cazador, solamente puedes disparar una vez, porque cuando los gorriones y las palomas oigan el primer disparo van a salir pitando y no van a volver.
¿A quién elegirías disparar?
Efectivamente, la paloma tiene más probabilidades de morir, simplemente por permanecer más tiempo del debido en un lugar peligroso.
Eso es justamente lo que les ocurre a muchos Traders: son insaciables, siempre quieren ganar más y más y no se dan cuenta de que el mercado es uno de los lugares más hostiles para estar más tiempo del debido: los tiburones harán lo máximo posible para confundirte y acabar tomando malas decisiones, quedándose con tu dinero.
Te preguntarás a qué viene la metáfora de la paloma y el gorrión para hablarte del peligro que supone llevar posiciones Overnight en períodos de alta volatilidad.
Te cuento.
Si mantener trades abiertos por la noche no es tu guerra, no entres en esa batalla.
Cada día nos estamos encontrando con nuevas noticias que tambalean los precios: Trump declara el Estado de Alerta en América, Italia clausura sus fronteras, gran parte del gabinete de gobierno de España está infectado, cientos de muertos diarios por la enfermedad, etc
Esta incertidumbre y cambio de paradigma está causando grandes movimientos en la bolsa, tanto de día como de noche.
Para Intradía o Swing limita la operativa a un horario razonable y cierra las posiciones antes de terminar la sesión.
Sé el gorrión, no merece la pena arriesgarse continuamente y perecer en el intento como la paloma.
Con la montaña rusa actual el riesgo es altísimo, por dos motivos:
- Tú no estás delante de las pantallas (deberías dormir) y si ocurre un hecho relevante de madrugada no tienes margen de maniobra.
- Los GAPS de apertura están quebrando cuentas.
En la imagen de arriba puedes ver cómo el Dax30 abrió el 9 de marzo, lunes, 500 puntos por debajo del cierre del viernes. No sólo eso, sino que llegó a dejarse más de 1.000 puntos intradía.
Es decir, que con solo 2 lotes de Dax30 comprados el viernes antes del cierre «por si rebotaba que ya ha caído mucho«, el lunes a las 9 de la mañana encuentras un agujero en tu cuenta de -2.000€.
No está mal.
Sé que algún trader/formador famosillo recomienda a sus alumnos operar los gaps buscando el cierre intradía. A mí es una estrategia que nunca me ha gustado, porque si bien es cierto que gran parte de los GAPs terminan cerrándose, con que sólo uno no lo haga tu puedes ir buscando otro hobby.
No se puede ser yihadista de ningún método. Las circunstancias han cambiado y toca adaptarse. La otra opción es la quiebra. Tú eliges.
El GAP de antes no es el único que hemos tenido estas semanas de infarto. Y creo que tampoco será el último.
El siguiente gráfico en pantalla es la apertura del Dow Jones ayer lunes.
El viernes los inversores se sintieron esperanzados por el estado de emergencia y el cierre fue netamente alcista (subidas del 10% de media).
Sin embargo no les gustó que durante el fin de semana no se tomara ninguna medida restrictiva para prevenir el contagio. La bolsa americana caía after-hours más de un 5%.
El supervisor cerró la negociación de futuros temporalmente ante la debacle que se avecinaba. No era más que un parche, el regulador no tiene capacidad de hacer subir o bajar las cotizaciones.
Llegó la apertura: el Dow Jones abrió 2.300 puntos por debajo del cierre del viernes, ¡más de un 10% de caída! Una de las mayores registradas.
El destrozo que te ha podido hacer en sólo un fin de semana es como para pensárselo dos veces.
Además ese Gap tardará días o semanas en cerrarse, no tiene pinta de que las bolsas vayan a subir como locas inminentemente. Antes de nada precaución, primero céntrate en no perder y luego ya llegarán las ganancias.
Lección 3: La Volatilidad es sinónimo de Oportunidades. Aprovéchala
Un mercado parado es lo más coñazo del mundo. Cuando en una semana sólo has podido hacer uno o dos trades sufriendo como un bellaco maldices haberle dedicado tanto tiempo en lugar de estar haciendo otras cosas.
Es bueno que los precios se muevan. La volatilidad es el aire que respiramos los especuladores. Tampoco sería lógico que cuando llega la chicha estemos quejándonos porque se mueve demasiado, ¿no crees?
Eso sí, ante unos movimientos tan bestias hay que bajar el pistón con el volumen. Ya hablé de ello en este post sobre la gestión del riesgo.
Si antes esperabas sacarle al DAX 30 puntitos necesitabas 5 lotes para 150€. Ahora que se mueve 10 veces más con 1 lote te metes al bolsillo 300€. Las cuentas no engañan.
El dilema ético del Trading en las crisis
Antes de cerrar el post quiero hacer un disclaimer sobre lo visto en el último punto.
Es evidente que los movimientos más fuertes siempre llegan en caídas. Hay un conocido dicho que aplica a la perfección «El mercado sube en escaleras y baja en ascensor»
Por eso en época de crisis es cuando más pasta se puede hacer.
Alguno dirá que me alegro de los cientos de fallecidos diarios, que estamos esperando que a la gente le vaya mal para ganar dinero… En definitiva, que somos unos aprovechados
No entienden la realidad. Las reglas del juego son las que son y ninguno de nosotros puede cambiarlas. O las entendemos y vamos a favor o nos estrellamos. Lo que no podemos hacer es ir contra corriente.
Con las crisis es cuando más pasta se puede hacer, sí. Pero también cuando más dinero se puede perder. ¿En qué lado prefieres estar?
Conclusiones
El mercado ha cambiado radicalmente en un par de semanas. No se parece en nada al pausado escenario de los últimos años. Está irreconocible.
El shock sanitario ha afectado directamente a la economía y el temor al pinchazo de la burbuja de deuda pública está muy presente entre los inversores. Las ventas se han masificado, muy pocos quieren estar comprados con esta incertidumbre.
Como nosotros focalizamos la atención en el corto plazo nos ponemos el mono de trabajo y salimos a faenar en un contexto favorable. En río revuelto ganancia de pescadores.
Ahora bien, para conseguir llenar el bolsillo es fundamental salir con una estrategia. Sino macho, lo siento mucho pero date por fastidiado.
Puedes aprender la mía, la Reversión a la Media. En este escenario te sentirás cómodo con ella, estarás el mínimo tiempo posible donde no toca y sacarás Profit tras Profit casi sin darte cuenta.
Quienes lo han probado ni se plantean volver atrás a sus anteriores sistemas. Saben que no van a encontrar algo más potente y donde maximizar tanto el ratio esfuerzo / beneficio. No lo digo yo, lo dicen los demás.
¡Un saludo y muy buen trading durante la marejada!
Enrique Mazón
PD: Acuérdate de tomar precauciones que la cosa no está para bromas 😉
